Antes de encontrar tu porqué, construir un negocio es simplemente trabajo… Pero una vez que encuentras tu PORQUÉ, el trabajo tiene un propósito.
Aquí hablamos mucho sobre encontrar la libertad.
Para algunas personas, la libertad es su “por qué”. Simplemente quieren liberarse de muchas cosas diferentes: su trabajo, su jefe, su falta de tiempo, sus restricciones financieras.
Si te convertiste en inversionista inmobiliario para encontrar libertad, ¿de qué quieres ser libre? Si no puedes responder esa pregunta de inmediato, aún no has encontrado tu porqué.
Una vez que descubres tu porqué, toda tu vida cambia. Te despiertas listo para aprovechar al máximo tu día. Te acuestas sabiendo que estás un paso más cerca. En el intermedio, trabajas con pasión porque sabes que el trabajo importa.
Aquí está lo que un artículo reciente de Forbes tenía que decir sobre encontrar tu por qué:
Un claro sentido de propósito te permite enfocar tus esfuerzos en lo que más importa, impulsándote a tomar riesgos y avanzar independientemente de los obstáculos.
¿Cómo cambiaría tu negocio si tuvieras más enfoque y estuvieras dispuesto a tomar más riesgos? Es exponencial cómo encontrar tu porqué puede cambiar tu vida, tu negocio y las vidas y negocios de las personas que te rodean.
Pero hay un déficit de razón. La mayoría de las personas están trabajando sin un sentido de propósito. Están trabajando para construir riqueza, pero no saben por qué la quieren.
¿Cómo encuentras tu por qué?
No hay realmente una fórmula a seguir, pero hay preguntas que debes hacerte a ti mismo:
1. ¿Qué te inspira?
Piensa en los momentos de tu vida en los que te has sentido más preparado para enfrentar al mundo. ¿Cómo llegaste a ese punto? ¿Cómo puedes tomar lo que te inspiró entonces y hacerlo parte de tu vida diaria? ¿Qué necesitas hacer para lograrlo? Esta pregunta se trata de mantener tu tanque lleno. ¿Cómo estás cuidando tu salud social, emocional, espiritual, ambiental, física y mental cada día? Una vez que tengas un plan para cuidarte a ti mismo, tendrás más espacio para perseguir la inspiración.
- ¿En qué eres bueno?
¿Has visto el diagrama de Venn para encontrar tu pasión? Son tres círculos que se superponen de “lo que amas”, “lo que paga bien” y “en qué eres bueno”. Tienes que encontrar un porqué que abarque los tres. Si estás trabajando en algo que se te da bien, pero no te apasiona o no está pagando las facturas, es hora de encontrar una nueva pasión.
- ¿Quién te necesita?
Para la mayoría de las personas, su porqué va a tener que ver con su “quién”. Si tienes una familia, alguien que depende de ti o una comunidad de la que te apasiona, esas personas van a estar en el corazón de tu porqué. Trabajar para uno mismo solo te llevará hasta cierto punto. Dar nos da propósito. Piensa en el futuro que quieres crear para las personas que te importan. Cuando quieras renunciar, esos rostros te harán seguir adelante.
4. ¿Cómo dejarás el mundo?
Esta es otra forma de avivar tu fuego… y encontrar tu porqué. Tu trabajo tiene impacto. ¿Qué tipo de impacto tendrá? Quieres dejar un legado. Puede ser generacional: construir un negocio del cual se beneficien los hijos de tus hijos. O puede ser local: crear espacios en la comunidad donde la próxima generación pueda jugar y crecer. Incluso si estás empezando, tienes tiempo para dar. Piensa en cómo quieres dejar el mundo y trabájalo en tu porqué.
¿Has encontrado tu por qué? Ayuda a inspirar a otros compartiendo lo que es y cómo lo encontraste en la sección de comentarios a continuación.